Este verano, apareció mi hija con una bolsa llena de material para acolchar. Reglas, telas, patrones... y estuvo enseñando a sus cuñadas a hacer un sencillo quilt y a acolcharlo a mano...
Lo pasamos genial. Entre todo el barullo me quedé con la idea de un pequeño quilt para colgar en la pared y este es el resultado.
Los diseños de aplicación son del libro Simply Rouge y he bordado los nombres de mis nietas.